Porque tu equipo no es IA

La ciencia del comportamiento demuestra que los seres humanos ignoran órdenes mal planteadas (¡igual que cuando le gritas a tu asistente de voz y te manda al clima de Timbuktú en lugar de abrir Spotify!). En cambio, un buen prompt genera claridad mental y activa la motivación intrínseca. Liderar con prompts efectivos evita que tu gente te mire con cara de “¿mande?” y empiece a trabajar con ganas.

Porque el cerebro ama las buenas preguntas

Según estudios en neurociencia, las preguntas poderosas activan la corteza prefrontal, el área que dispara creatividad y resolución de problemas. Cuando usas prompts inteligentes en vez de frases de jefe tóxico, tu equipo no solo hace lo que pides: encuentra mejores formas de hacerlo. O sea, menos “apaga fuegos” y más “enciende neuronas”.

Porque mandar ya no motiva, pero inspirar sí

La motivación extrínseca (“hazlo porque lo digo yo”) tiene fecha de caducidad. La motivación intrínseca (“hazlo porque conecta contigo”) es la gasolina premium del rendimiento humano. Leadership Prompts enseña cómo pasar de jefear como drill sergeant a comunicarte como alguien que sabe encender motores internos… sin tener que gritar ni dar discursos de tres horas.